Sobre la enseñanza de los principios naturistas en las escuelas
Cualquier naturista auténtico entiende que enseñar los valores del naturismo en las escuelas no significa fomentar la desnudez en las aulas. Significa enseñar a respetar el propio cuerpo, las diferencias de los demás y la propia naturaleza. Significa normalizar el cuerpo humano, acabar con el pensamiento basado en la vergüenza y dar a los niños herramientas para crecer con confianza, empatía y equilibrio.
Quienes se oponen incluso al debate sobre el naturismo en la educación suelen pertenecer a tres categorías:
Personas que se dedican a este estilo de vida por motivos ocultos, quetemen exponerse porque no lo hacen por las razones correctas.
Personas demasiado temerosas de hablar abiertamente, que temen perder su empleo, arruinarse profesionalmente o avergonzarse públicamente.
Y los atrapados por la ignorancia, condicionados a asociar el cuerpo desnudo con el peligro, la inmoralidad o la indecencia.
No les culpamos. Comprendemos las presiones. Pero no debemos dejar que su silencio se convierta en el nuestro.
Creemos que el naturismo no tiene nada que ocultar. Sus valores fundamentales-aceptacióndel cuerpo, bienestar mental, conexión con el medio ambiente y comprensión no sexual de la desnudez- puedeny deben formar parte de la educación temprana. Estos principios pueden enseñarse sin que haya desnudez y pueden empoderar a los niños en sus años más vulnerables.
Callarse por miedo a las reacciones negativas sólo refuerza el estigma. El verdadero cambio comienza cuando hablamos con claridad, respeto y sin vergüenza.
Si el puesto, la profesión o el negocio de alguien no puede sobrevivir a la asociación con la verdad sobre el naturismo, entonces no es el naturismo lo que está mal, es la ignorancia de la sociedad lo que hay que cuestionar.