Declaración de NaturismRE: Por qué debemos hablar de naturismo en las escuelas

A continuación figura una declaración de NaturismRE en la que se aborda la urgencia más profunda de nuestra propuesta educativa. Refleja la realidad a la que se enfrentan las comunidades naturistas de todo el mundo y por qué el silencio ya no es una opción.

Durante décadas, las organizaciones naturistas mundiales han evitado la polémica para proteger su imagen y mantener el número de miembros. Esta cautela ha mantenido las puertas abiertas, pero también ha impedido el progreso. ¿Cuál es el resultado? El naturismo no ha avanzado. De hecho, está retrocediendo: una playa cerrada, una política revocada, una decisión tendenciosa cada vez.

Creemos que la controversia puede ser una fuerza positiva. Crea conversaciones. Saca a la luz prejuicios ocultos. Obliga a la sociedad a enfrentarse a sus propias ideas erróneas y a preguntarse por qué seguimos teniendo miedo del cuerpo humano.

Enseñar valores naturistas apropiados para la edad en las escuelas -como la confianza en la apariencia física, el respeto por todos los tipos de cuerpo y la comprensión de la conexión natural entre los seres humanos y el medio ambiente- no es peligroso. Lo que es peligroso es dejar que generaciones de jóvenes luchen contra la vergüenza, el aislamiento y la ansiedad en su transición a la edad adulta sin herramientas para afrontarlo.

El naturismo no consiste en desnudarse. Se trata de normalizar el cuerpo, separándolo de la vergüenza y la hipersexualización. No podemos confiar en los adultos criados en el estigma para romper ese ciclo. Tenemos que empezar con la próxima generación.

Sí, algunos reaccionarán con indignación. Sí, algunos políticos y voces mediáticas intentarán tergiversar nuestro mensaje. Y sí, existe un riesgo real de que intenten cerrar los pocos espacios que ya tenemos. Pero pregúntate: ¿estamos contentos con cómo están las cosas?

No, no queremos. Queremos:

  • Más reconocimiento

  • Más respeto

  • Más espacios para vivir libremente

  • Mayor comprensión del público en general

Esperar en silencio mientras se erosionan nuestros derechos no es una estrategia. Es rendirse.
No queremos que nos vean como exhibicionistas o radicales. Queremos que se nos reconozca como personas que creen en el respeto al cuerpo, la salud mental y la conexión con la naturaleza. Y sabemos que la única manera de lograr ese futuro es educar.

No con protestas en las calles. No escandalizando a la gente. Sino iniciando la conversación pronto, en las escuelas, con programas educativos que enseñen a los niños a tener confianza en su cuerpo, a respetar las diferencias de los demás y a comprender que el cuerpo humano no es motivo de vergüenza.

El naturismo no sobrevivirá si seguimos escondiéndonos. Solo crecerá si dejamos de tener miedo a hablar.

No luchamos sólo para preservar lo poco que tenemos.
Estamos aquí para construir un futuro mejor, más libre y comprensivo.

Comienza con la verdad.
Empieza con la educación.
Empieza con valentía.